Decidí cambiar mi relación con las redes sociales.

Y me gusta más así.

Me encantan las computadoras desde que sé que existen y eso fue hace muchos años. Me encanta poder comunicarme con personas que están en varias partes del mundo, las conozca o no. Me gusta ser parte del mundo y saber que algunas acciones mías pueden ayudar a mejorar algo. Me encanta poder tener libertad de expresión y me encanta enterarme de noticias de todos lados, no solo de donde vivo. Las redes sociales son una parte importante en el día a día pero la verdad es que ya venía pensando desde hace bastante tiempo que no quiero estar tan presente en ellas. 

La primera vez que usé una red social quizás fue cuando yo tenía, ¿12 años? Yo usaba Metroflog. Tiempo después, no sé cuánto tiempo, empecé a estar en todos lados, desde MySpace a Twitter y creé mi cuenta en Facebook cuando Facebook solo estaba en inglés. La pasaba bien. 

Tuve mis amagues en todo; en el 2011 decidí dejar de estar tanto tiempo en Facebook y después me creé como cinco perfiles más pero antes borrando el anterior que había creado. Me uní a Instagram en el 2013 y en el 2018 volví a publicar una foto después de cuatro años de no haber publicado nada, solo por una apuesta que perdí y tenía la esperanza de que me iba a empezar a gustar ser activa en mis perfiles, pero obviamente no fue así... Muchas veces sentí ansiedad al publicar algo en Instagram y viéndolo desde lejos, no tiene demasiado sentido. Algunas de mis amigas me repitieron que admiraban como yo podía publicar todo lo que yo quería sin preocuparme por el qué dirán pero eso cambió un poco en este último tiempo, ya que tenía unos ojos lejanos viendo lo que yo hacía, juzgando y eso no me afectó pero sí me hizo reflexionar. 

No entiendo, ¿por qué tengo que compartir todo con el mundo? Bah, ¿qué mundo? Creeme que hay veces en las que nadie le presta atención a nada, realmente. Pero, lo repito, ¿por qué tengo que compartir? ¿En qué me cambia compartir una foto en donde sale mi cara o mi cuerpo? ¿En qué me cambia compartir un viaje que hice? ¿En qué me cambia compartir algo que me hizo reír? ¿En qué me cambia escribir una opinión sobre cualquier cosa? ¿Me cambia en algo? ¿Me ayuda en algo? ¿Ayudo a alguien? ¿Es necesario? ¿Estoy obligada? ¿Cambia algo para mejor? Yo pienso que no, no mucho. Todo lo que yo subía no llegaba a demasiadas personas, de hecho, acá en este Blog puedo llegar a muchas más y lo mejor/peor de todo es que ¡a nadie le importaba! Yo podía poner una imagen super rara pero los demás pensarían “típico de ella“ y ya está. Qué pérdida de tiempo y no, no lo estoy viendo como algo serio, no lo estoy pensando mucho, es lo opuesto, ya fue, ya está. Lo que sí vi como algo serio fue un comentario que me hicieron en una red social y que leí apenas desperté; afectó mi salud mental porque estoy viviendo algunas situaciones que me mantienen alerta y eso que me escribieron tuvo que ver con muertes y cáncer de familiares humanos y perros que amo, así que lloré por un comentario de alguien que no tenía su nombre ni su foto y que quedó en ridículo porque muchas personas me defendieron y vieron el mal que hizo. En otras circunstancias yo no le habría prestado atención pero ya estaba cansada y fue ahí el final de todo, ya que sentí como si una parte de mí hubiera muerto y obviamente no fue por ese comentario, sino por acumulación. 

Quise alejarme por la famosa y deseada libertad, esa que siempre busco y que buscamos pero que trae consecuencias en las que tal vez no pensamos. Cualquier persona puede opinar sobre todo lo que quiera y eso está bien. Yo elijo no exponerme en esos lugares. No es lo mismo estar allá que acá en este Blog o Tumblr, porque por ejemplo acá en mi Blog atraigo a muchas personas interesantes, sensibles, empáticas y con las que puedo compartir demasiado de lo que me gusta y estoy muy agradecida por ello. 🤍 Me respetan, las respeto, se interesan, yo me intereso y es muy lindo.

Si fuera más popular, seguiría en todos lados solo para compartir información sobre cosas que ayuden a los que más necesitan y para poder mejorar en algo mucho más importante que lo superficial pero ese no es el caso así que me despedí. No me sirve de casi nada seguir en las redes sociales. Es muy lindo ser parte de eso y agradezco poder elegir pero no me sirve en este momento. Mi inicio en Instagram, por ejemplo, está repleto de información sobre el veganismo y el mundo, así que era bueno entrar y ver eso pero ya está. 

Cambié mi privacidad, cambié mi nombre y usuario. Parece que me escondí pero simplemente hubo un cambio muy grande. Mis perfiles siguen ahí para que los vean unas pocas personas cercanas a mí, solo algunos familiares y amigos pero están por llenarse de telas de araña. Ya no tengo ganas de compartir por esos lados. Esto no me hace mejor ni peor. Yo definitivamente no digo que la gente que no está en las redes sociales es mejor, todas las personas somos diferentes y esto es lo que yo elegí. 

Intenté tantas veces ser activa pero no es para mí o tal vez no es para mi yo de ahora y en el futuro esto es diferente, aunque lo dudo un poco. 

Prefiero enfocarme en disfrutar la vida desde otro lado, en hacer cosas que ayuden a mi yo del futuro y que ayuden en general, no solo a mí. Siento que mi vida es muy corta como pasar tiempo ahí. Antes me entretenía pero eso ya cambió y bastante. Estoy enfocada en pasar buenos ratos, en aprender, en estar más presente y simplemente estar. 

🌼🕊/Mitä elämä tuo,

se tulkoon minun luo.

Virheen mahdollisuus ihmisyydelle sisällön suo.

Me ollaan samaa tuhkaa,

samaa kevyttä ilmaa.

Joten rauha nyt,

tää maailma on vihaan kyllästynyt./❕

¡Oh! Y... Reputation era.